Corría el año 2013, y el equipo de O’Higgins debía viajar al Estadio CAP, en Talcahuano, para medirse con el elenco de Huachipato por la 3° fecha del Torneo Transición, eran muchas horas de viaje y más de 430 kilómetros, desde Rancagua a la ciudad puerto.
La hora destinada del partido era a las 22:00, y el elenco celeste se llevó la alegría, con el triunfo por dos goles a cero, gracias a Gonzalo Barriga y Rodrigo Rojas, cabe indicar que Huachipato, era el campeón vigente del torneo nacional.
Cuando finalizó el partido, eran más de 200 los aficionados que habían viajado a apoyar a O’Higgins, y ya era hora de volver a casa felizmente. Pero algunos hinchas de la barra del club tenían presupuestado viajar a Dichato para celebrar el triunfo conseguido.
Cerca de la 01:00 de la mañana, cuando en las redes sociales se comenzaba a comentar, sobre un accidente en la Cuesta Caracoles de Tomé, cuya zona es muy peligrosa por las curvas que posee.
Y después de unas horas se confirmaría la lamentable noticia y y que se trataba de los hinchas celestes que habían sufrido un accidente, ya que el autobús interurbano en el que viajaban cayó a un precipicio de aproximadamente 150 metros.
Las primeras informaciones decían que el autobús habría sufrido un calentamiento en las balatas de los frenos que en consecuencia produjo esta tragedia. Pero finalmente, la SIAT de Carabineros, dio a conocer como causas del accidente el desconocimiento de la ruta y el exceso de velocidad, en una zona donde está claramente señalado.
De los 37 hinchas que estaban a bordo en el autobús, 16 perdieron la vida en ese lugar y dejo a 21 heridos, de diversa consideración, que fueron trasladados a los hospitales más cercanos.
Al día siguiente, los familiares de las víctimas y heridos viajaron desde Rancagua a los hospitales para obtener más información de lo que ocurrió.
Además de los Dirigentes del club también viajaron entre ellos Pablo Hoffmann, Gerente General, y el entrenador Eduardo Berizzo, quien en representación del plantel dio las condolencias a las familias afectadas, dando de alguna manera el apoyo por parte del club.
En Rancagua se decretaron 3 días de luto regional y en distintas canchas de Chile y en otros lugares del mundo se realizaron minutos de silencio.
Esta tragedia es considerada como el peor desastre que ha ocurrido en la historia del fútbol chileno y dentro de las más tristes a nivel mundial, solo superado por el accidente de avión del Chapecoense.
